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La cirugía que perjudicó a Vania Antelo (Magnífica) | Santa Cruz - Bolivia Hace 10 años (03/08/2010 10:37:36) |  |
ENTREVISTA
- Te perdiste un buen tiempo, ¿a qué se debió?
- Es verdad que estuve medio dormida, pero voy a tratar de estar más activa en el modelaje, porque estoy más estable en el trabajo. Ya engrané y hemos quedado con Pablito en que modelaré dentro de lo que mi tiempo me lo permita.
- Pese a que has estado inactiva no descuidaste tu estado físico...
- El gimnasio es un hábito, forma parte de mi rutina diaria. Además estoy haciendo natación por las noches por un problema cervical que tuve. También me esfuerzo por comer sano, porque padezco colesterol hereditario.
- No puedo dejar de preguntarte si tu alejamiento de las pasarelas tuvo que ver con tu nariz; se dijeron muchas cosas...
- No, no tuvo nada que ver. Me la operé porque siempre me incomodó el tamaño de mi nariz para mi cara tan chiquitita. Lamentablemente, por esas cosas de la vida quedé mal y no es que no me gustó como quedó, sino que de verdad sufrí un accidente quirúrgico. Me sometí a una segunda y a una tercera operación, ya como parte de un proceso reconstructivo con injerto de mi cabeza, y mi cuerpo lo rechazó, quedé aun peor.
Por si fuera poco, vi como había gente que se alegraba por lo que yo estaba pasando, estaba desfigurada y ellos escribían en blogs burlas sobre mí. Después me fui a Buenos Aires a operarme por cuarta vez; no pedía estar bella, te lo juro, era lo último que me importaba, sólo quería volver a ser normal.
(Foto: Ximena Vargas, Miss Santa Cruz 2009 y Vania Antelo)
- ¿Por fin la cuarta fue la vencida?
- Averigüé quién era el mejor cirujano, me costara lo que me costara. Me puse en manos del doctor José Juri, un argentino que trajo la Udabol. Me intervino con injerto de nuevo, de detrás de mis orejas; fue otro proceso de reconstrucción. Ya va a hacer un año y por fin estoy bien.
- Una amarga experiencia la tuya...
- Lo que me pasó fue una pesadilla: entré al quirófano por un detalle estético y salí desfigurada, pero nunca me bajoneé ni lloré por el tema.
- ¿Te das cuenta de que con esta experiencia muchas jovencitas lo pensarán dos veces antes de ir al quirófano?
- Jugamos con nuestra salud como si fuera ajena. No estoy en contra de la cirugía plástica, pero he quedado curada de espanto, voy a entrar a un quirófano sólo cuando sea para tener a mis hijos. Yo tuve la suerte de que pude luchar por una reconstrucción (me presté dinero al banco), hay mucha gente que se queda así porque no tiene recursos. Hay cirujanos que se toman a la ligera su trabajo.
El Deber |
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